Publicada el 29 octubre, 2024
Durante la sesión desarrollada hoy, la Cámara de Senadores aprobó por unanimidad un proyecto de ley que introduce modificaciones importantes en la normativa de seguridad vial. La principal novedad es la extensión de la vigencia de las licencias de conducir para conductores de hasta 65 años, que ahora será de diez años en lugar de los cinco actuales. La iniciativa, impulsada por el Poder Ejecutivo en conjunto con una iniciativa presentada por el diputado provincial Gustavo Cairo, se trabajó a partir de la acumulación de ambos proyectos en la Cámara de Diputados.
Los cambios introducidos en el Senado de Mendoza, fueron incorporados en el artículo 22bis de la Ley de Tránsito, vinculado a la vigencia de estas licencias. Por este motivo es que la propuesta deberá volver a la Cámara de Diputados en segunda revisión.
Las modificaciones a la Ley 9024, que regula el tránsito y la seguridad vial en la provincia, buscan adaptar la normativa provincial a estándares internacionales y simplificar el proceso de renovación de las licencias. Aunque Mendoza ha adherido parcialmente a la Ley Nacional 24.449, que regula el sistema de tránsito a nivel Nacional, la provincia mantiene su propia normativa en ejercicio de sus facultades constitucionales.
Durante la sesión, el senador Walther Marcolini, miembro informante de la propuesta y presidente de la comisión de Legislación y Asuntos Constitucionales en el Senado, explicó que los cambios principales de esta reforma son de carácter formal, destinados a adecuar la normativa a los nuevos lineamientos de la Ley de Ministerios. Para el legislador, el núcleo de la reforma se encuentra en el artículo 22 bis, que introduce una extensión en la vigencia de las licencias de conducir y representa un avance significativo para los habitantes de Mendoza.
Marcolini destacó que estas modificaciones responden a la necesidad de simplificar y agilizar los trámites administrativos, alineándose con los avances en medicina y el aumento en la expectativa de vida. El impacto de esta normativa en la vida de los mendocinos será directo, facilitando el acceso y mejorando la comodidad en la obtención y renovación de un documento fundamental como es la licencia de conducir.
El senador Armando Magistretti, del Partido Demócrata, explicó que el espacio que representa acompañará el proyecto que se encuentra en tratamiento.
También manifestó su opinión el senador Pedro Serra, del Partido Justicialista, quien informó que acompañarán esta propuesta, ya que están «más que de acuerdo con esto y, por ello, queremos que este proyecto salga de una vez». De igual manera, la jefa de la bancada justicialista, Adriana Cano, sostuvo que comparten el espíritu de la ley.
El legislador Germán Vicci, de la Unión Mendocina, manifestó que acompañarán este proyecto y agradeció a su par, el diputado Gustavo Cairo, compañero de bancada, quien fue uno de los impulsores de esta iniciativa. En la misma línea, el senador Dugar Chappel, del Partido Verde, expresó que celebran que la renovación sea de 10 años, ya que provocará una disminución en los impuestos que deben pagar los mendocinos.
El cierre estuvo a cargo de la presidenta del bloque Radical, Natacha Eisenchlas, quien agradeció el acompañamiento de todos los bloques a este proyecto. Aclaró que no es que no hubo posibilidad de tratarlo en comisiones, sino que se llegó a un acuerdo al considerar que esta media sanción es importante para los mendocinos, permitiendo un avance rápido.
La Ley Nacional de Tránsito establece una vigencia de cinco años para las licencias de conducir hasta los 65 años, permitiendo a cada provincia definir el criterio para edades superiores. En Mendoza, la normativa actual establece que, a partir de los 65, la renovación se realiza cada tres años y, desde los 70 en adelante, se exige de forma anual, sumado a una prueba de manejo.
Con la nueva normativa, el periodo de vigencia de las licencias de conducir se extiende de la siguiente manera:
Quedan excluidos de esta disposición los condenados por delitos relacionados con la conducción imprudente y aquellos reincidentes en infracciones por manejar bajo los efectos del alcohol. En estos casos, la vigencia de la licencia se mantendrá en cinco años.
La ley aprobada introduce también cambios en los requisitos para la renovación de la licencia de conducir. Se estipula que:
Para los mayores de 65 años, no se requerirá una nueva prueba de manejo, salvo que exista una indicación médica o que haya pasado más de un año desde el vencimiento de la licencia. El personal de la Policía de Mendoza y del Servicio Penitenciario Provincial que cumpla funciones de chofer o motorista estará exento de los costos de renovación.
En otro aspecto relevante, se introducen modificaciones en la Ley de Ministerios con el objetivo de centralizar y optimizar la organización de las políticas de seguridad vial. Hasta ahora, la Dirección de Seguridad Vial, la Unidad Ejecutiva de Seguridad Vial, la Dirección de Transporte y los municipios compartían estas funciones. La Unidad Ejecutiva de Seguridad Vial, que estaba bajo el Ministerio de Gobierno, Infraestructura y Desarrollo Territorial, será transferida al Ministerio de Seguridad y Justicia. Este cambio busca reducir la fragmentación de responsabilidades en el control del tránsito y facilitar la coordinación entre los distintos organismos.
Para Gustavo Cairo, autor de este proyecto, esta medida representa un avance en términos de equidad, ya que elimina la obligatoriedad de exámenes teóricos y prácticos adicionales para los adultos mayores al momento de renovar su licencia, enfocándose únicamente en los aspectos médicos, en línea con la experiencia internacional. Además, el descuento en el arancel de renovación es una medida que reconoce las particularidades de este grupo, quienes, según estadísticas, suelen conducir con mayor prudencia y participan en menor medida en accidentes graves.
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